La Marcha Negra llega a Madrid mientras Ciñera es un pueblo odiado por la reacción, masacrado por el miedo. Mientras siguen su encierro los compañeros mineros que sólo quieren abandonar los pozos con el cumplimiento de la palabra dada a los hombres y mujeres de la minas.
Y mientras las mujeres demuestran, día a día, hora a hora, que son una pieza clave en esta lucha de clases que vienen ganando los mentirosos compulsivos y los enfermos de avaricia. Aqui puedes encontrar el calendario de recibimiento.
He querido unir en esta entrada, mientras se oyen en los alrededores de Madrid los cantos de la #marchanegra, unos cuantos documentos para reflexionar, levantarse y actuar. Como esta entrevista al compañero Zana:
Y también esta carta:
CARTA DESDE CIÑERA AL SUBDELEGADO DEL GOBIERNO
Si eres neutral en momentos de injusticia, estás del lado del opresor (Desmond Tutu)
Me encuentro en un brete al no hallar una forma correcta con la que iniciar esta carta. Mis padres, honrados mineros ellos, me enseñaron que había que, como norma de buena educación, llamar señor y tratar de usted a quien ostenta cargos de relevancia, así como a las personas mayores y a las personas dignas.
Debería haber encabezado este escrito con un “señor Subdelegado”, pero es que entiendo que lo de “señor” le viene grande y que hace injusticia, por comparación, con muchos mineros a los que sí suelo, porque sí se lo merecen, llamárselo. Se entiende mi confusión ¿no?, por eso sepa usted que el tratamiento, que a partir de ahora le voy a dispensar, es mera cortesía, es simplemente una frontera que marque la diferencia entre “usted” y yo. Aún hay Clases.
Y usted es de la clase de los represores y embusteros.
Hoy, 5 de julio de 2012, los habitantes de Ciñera nos hemos desayunado con unas declaraciones suyas en un medio de comunicación, de esos que tienen ustedes a su servicio para mentir y engañar, en las que se descuelga usted con una serie de improperios, de estupideces, de memeces, que ellas, por sí solas, deberían hacerle entender que “los zapatos no son de su talla”. Si tuviese usted un poco de dignidad, de amor propio, se metería usted debajo de la mesa de su despacho y no saldría hasta los carnavales, y ese día lo haría disfrazado para evitar ser reconocido.
Leyendo sus declaraciones me reafirmo en la creencia de que la necedad y el orgullo son vicios siempre inseparables. Y en su casta política, es decir el PP,, esa que proviene ideológicamente del fascismo franquista, además suelen ir acompañados de este tic de señoritos violentos.
Por si le queda alguna duda, yo, como vecino de Ciñera, recibo con los brazos abiertos a los mineros que están defendiendo lo que su partido, el PP, les está robando. A quien no recibiría de buen grado es a usted que ha mandado reprimir a un pueblo, a usted ni a ningún cargo político del PP, verdaderos responsables de la muerte de la minería y de las comarcas mineras. Quizás pueda decírselo más alto pero no más claro: usted no es bien recibido por mí, en cuanto a vecino de Ciñera, porque usted, como responsable del PP, es parte del problema.
Señor Subdelegado, no nos venga usted con mentiras. Nosotros sabemos bien la verdad. Sabemos bien quien dispara contra el pueblo, quien utiliza la violencia dentro del casco urbano. Sabemos bien quien golpea, amparados en el anonimato y la superioridad numérica, a un indefenso. Y le recuerdo que lo que usted hace, mintiendo impunemente, es también otra suerte de violencia, de ataque, de agresión. Supongo que embebidos en su propia estulticia han llegado a creerse sus propias mentiras, algo muy común entre mediocres que han llegado a ciertos cargos por la vía del regalo y no por la del mérito, pero le advierto, y no lo confunda usted con una amenaza, torres más grandes han caído.
¿Quiere usted que la violencia termine? Llame usted al ministro Soria (ese clon patético del patético Aznar) y dígale que no robe a los mineros, que cumpla lo firmado por el Estado español con los sindicatos, eso que todos, menos usted parece ser, hemos leído y que se llama “plan del Carbón 2006/2012”. Bueno no sé ni para qué pierdo el tiempo diciéndole que defienda a los mineros, usted, agarrado a la teta del cargo, ni lo ha hecho ni se espera que lo haga. Usted es de la misma cuerda que quien nos está, con la disculpa de la crisis, robando el presente y el futuro. Y no solo a los mineros en activo, sino a todos los habitantes de las Comarcas Mineras.
¿Quiere usted saber por qué el pueblo de Ciñera admira, defiende y apoya a los mineros que les están plantando cara? Porque sabemos eso, porque sabemos bien quién nos está defendiendo y quién nos está atacando, y le aseguro que usted (y el PP), para quien esto escribe, está en el segundo grupo.
A buen seguro que esta carta ningún medio de comunicación la publicará, pero por si acaso algún acólito suyo en esta comarca se la hace llegar, le voy a pedir un favor. Dicen que si todo el que no tiene nada interesante que decir se callase, en el mundo habría un hermoso silencio que nos dejaría oír los bellos sonidos de la naturaleza. Háganos un favor: déjenos oír cantar a los pájaros.
Sin ningún tipo de aprecio se despide, desde Ciñera, Zana
Y este video, que quizás ya hayas visto, para que se nos caiga de una vez la venda de los ojos:
Y algo más información de la llegada de la #marchanegra a los alrededores de Madrid que puedes encontrar en:
Crónica de cómo la marcha minera llega a Las Rozas. Y de su paso por la Sierra
Y acabo, finalmente, con unas sonrisas: http://es.calameo.com/read/001527496a61430b6697c